Desde 1981 la Institución identificó la necesidad de contar intramuros con un Banco de Ojos, que permitiera la atención de tejido donante para rehabilitar a pacientes con baja visión por motivos de lesiones corneales. Para tal efecto, las autoridades de la fundación entraron en contacto con aquellas de la Cruz Roja Mexicana, quienes abrazaron de manera entusiasta la idea.  Así fue como se fundo en 1981 el Banco de Ojos Cruz Roja Mexicana – Instituto de Oftalmología, en donde la Cruz Roja Mexicana se convirtio en la fuente del tejido y la Institución aportó el mantenimiento y la técnica para la obtención, preservación y distribución de corneas. Desde su fundación y hasta la fecha, el Banco de Ojos Cruz Roja Mexicana – Instituto de Oftalmología, ha funcionado ininterrumpidamente. La obtención del tejido corneal se ha efectuado con la anuencia, en todos los casos, de los familiares del fallecido. El funcionamiento se instrumento de tal forma que lo que se dona, es exclusivamente la córnea mediante técnicas modernas de obtención. Éste mecanismo ha permitido que el Banco de Ojos no haya tenido en más de 20 años ningún contratiempo en su funcionamiento. El Banco de Ojos de la Cruz Roja Mexicana – Instituto de Oftalmología es hoy en día el modelo de Banco de Ojos que se ha procurado seguir en otras instituciones y, a pesar de las carencias de tejido, es hoy por hoy el que más tejido obtiene y el que ha mantenido las campañas y actividad de la donación de córneas en México. A pesar de esta actividad, el número de córneas obtenidas, comparativamente con las necesidades de tejido, es aún escasa y no alcanza siquiera para satisfacer la creciente demanda de tejido de la Institución. Por lo que desde 1995, acorde con la nueva legislación y a través del Banco de Ojos, se importa el tejido de diferentes estados de la unión Americana, ya las necesidades de córneas en la institucón son mayores a la obtención que se logra.